Los malos olores en las viviendas son un problema común que afecta tanto a casas unifamiliares como a edificios de comunidades de vecinos. En estos últimos, los olores desagradables suelen estar relacionados con el sistema de saneamiento, especialmente con las bajantes comunitarias y los botes sifónicos. Un fenómeno conocido como el «efecto jeringuilla» puede dejar tu hogar expuesto a olores procedentes del alcantarillado.
En este artículo, te explicamos cómo funciona este problema y cómo solucionarlo.
¿Qué es una bajante comunitaria y cómo funciona?
Las bajantes comunitarias son tuberías verticales que recorren los edificios, recogiendo las aguas residuales de todas las viviendas. Estas aguas incluyen:
“Aguas grises”: Procedentes de cocinas, lavabos, duchas y bañeras.
“Aguas negras”: Provenientes de los inodoros.
El objetivo de las bajantes es dirigir estas aguas hacia la red general de alcantarillado de forma segura y eficiente. Para ello, el sistema debe estar diseñado para soportar el flujo continuo de agua y residuos sin generar problemas de presión o obstrucciones. Un aspecto fundamental es la ventilación de la bajante, que permite equilibrar las presiones internas y evitar la formación de vacío o sobrepresión que pueda afectar al sistema de drenaje en las viviendas.
Los botes sifónicos: Barrera contra los malos olores.
Los botes sifónicos son dispositivos hidráulicos instalados en los desagües de las viviendas (fregaderos, lavabos, duchas, bañeras y otros aparatos sanitarios). Su función principal es impedir que los gases y olores del sistema de alcantarillado regresen al interior de la vivienda. Lo logran mediante la creación de un sello hidráulico, es decir, una columna de agua que bloquea el paso de los gases.
Este sello hidráulico es esencial para mantener un ambiente interior saludable. Sin embargo, su efectividad puede verse comprometida por cambios en la presión del sistema de tuberías, lo que nos lleva al problema del efecto jeringuilla.
El «Efecto Jeringuilla» y la Pérdida de Agua en los Botes Sifónicos:
El efecto jeringuilla es un fenómeno que ocurre cuando se producen cambios bruscos de presión en la bajante comunitaria, provocando la succión del agua contenida en los botes sifónicos. Como resultado, el sello hidráulico se rompe y se permite la entrada de gases y malos olores del alcantarillado al interior de la vivienda.
Este efecto se produce típicamente cuando se descargan grandes volúmenes de agua en la bajante, como al vaciar una bañera o al usar varios aparatos sanitarios simultáneamente. El rápido flujo de agua genera una presión negativa (vacío parcial) en la bajante, similar al efecto al tirar del émbolo de una jeringuilla, de ahí su nombre. Las viviendas situadas en los pisos inferiores son especialmente susceptibles a este problema debido a la mayor columna de agua por encima de ellas.
Importancia de la Ventilación en la Parte Superior de la Bajante:
Para prevenir el efecto jeringuilla y otros problemas de presión, es fundamental que la bajante esté adecuadamente ventilada en su parte superior, donde conecta con la cubierta exterior del edificio. La ventilación superior permite la entrada y salida de aire, equilibrando las presiones dentro del sistema de tuberías y evitando la formación de vacío o sobrepresión.
Características Clave de la Ventilación Superior:
- Libre de Obstrucciones: La abertura en la cubierta debe estar despejada, sin elementos que impidan el flujo de aire, como hojas, nidos de aves u otros desechos.
- Protección Adecuada: Es recomendable instalar un sombrerete o tapa protectora que impida la entrada de agua de lluvia y objetos extraños, pero que permita la libre circulación de aire.
- Altura y Ubicación Correctas: La ventilación debe sobresalir por encima de la cubierta a una altura determinada según las normativas locales y estar ubicada a una distancia segura de ventanas u otras aberturas para evitar que los gases expulsados puedan reingresar al edificio.
- Cumplimiento Normativo: La instalación debe seguir las normativas y códigos de edificación aplicables, garantizando su correcto funcionamiento y seguridad.
Una ventilación deficiente en la parte superior de la bajante puede resultar en problemas de presión que afectan a todo el sistema de saneamiento del edificio.
¿Cómo Reconocer los Malos Olores Producidos por el Efecto Jeringuilla?
Los malos olores asociados al efecto jeringuilla suelen manifestarse en baños y cocinas, especialmente en desagües que no se utilizan con frecuencia. Algunos indicios de que el sello hidráulico del bote sifónico se ha roto son:
- Olores Desagradables: Presencia de olores a alcantarilla en el interior de la vivienda.
- Ruido en las Tuberías: Sonidos de burbujeo o gorgoteo en los desagües al utilizar aparatos sanitarios.
- Desagües Secos: Al inspeccionar los sifones, se observa la ausencia de agua en su interior.
Soluciones para Prevenir los Malos Olores por el Efecto Jeringuilla:
Para solucionar y prevenir los problemas causados por el efecto jeringuilla, se pueden adoptar las siguientes medidas:
- Mantener los Botes Sifónicos con Agua: Verter agua regularmente en los desagües, especialmente en aquellos que no se usan con frecuencia, para asegurarse de que el sello hidráulico está presente.
- Instalar Válvulas de Aireación: Las válvulas de admisión de aire (VAA) se instalan en puntos estratégicos del sistema de tuberías y permiten la entrada de aire cuando se genera una presión negativa, evitando la succión del agua en los sifones.
- Mejorar la Ventilación de la Bajante: Asegurarse de que la ventilación en la parte superior de la bajante está correctamente instalada y libre de obstrucciones.
- Revisar el Diseño del Sistema de Saneamiento: Un profesional cualificado puede evaluar si el sistema cumple con los requisitos técnicos y normativos, y recomendar modificaciones si es necesario.
- Mantenimiento Preventivo: Realizar inspecciones periódicas del sistema de tuberías, incluyendo la limpieza de sifones y desagües, para prevenir acumulaciones que puedan afectar su funcionamiento.
Evitar la Entrada de Olores por la Campana Extractora de la Cocina
Otro punto de entrada de malos olores en la vivienda puede ser la campana extractora de la cocina. En edificios donde el sistema de extracción es compartido o donde hay corrientes de aire inversas, es posible que los olores de otras viviendas o del propio conducto regresen a la cocina.
Soluciones para Prevenir Olores a Través de la Campana Extractora:
- Instalación de Válvulas Antirretorno: Las válvulas antirretorno o clapetas permiten el paso del aire en una sola dirección. Al instalarlas en el conducto de extracción de la campana, se evita que el aire y los olores regresen al interior de la cocina. Ejemplo aquí y debes de tener claro el diámetro del conducto.
- Mantenimiento del Conducto de Extracción: Asegurarse de que el conducto está limpio y libre de obstrucciones. La acumulación de grasa y residuos puede impedir el correcto funcionamiento de la válvula antirretorno.
- Uso de Campanas Extractoras con Motor Independiente: Optar por campanas que tengan su propio motor y conducto de extracción independiente reduce significativamente el riesgo de entrada de olores externos.
- Revisión de la Instalación: Un profesional puede verificar si la instalación de la campana extractora cumple con las normativas y si existen fugas o conexiones inadecuadas.
- Sellado de Conexiones: Asegurarse de que todas las uniones y conexiones del conducto de extracción están correctamente selladas para evitar filtraciones de aire no deseadas.
Conclusión
Los malos olores en las viviendas pueden tener diversas fuentes, desde problemas en las bajantes comunitarias y botes sifónicos hasta la entrada de olores por la campana extractora de la cocina. Entender el funcionamiento de estos sistemas y aplicar medidas preventivas es esencial para mantener un ambiente interior saludable y confortable.